En el mes de febrero de 2025, Gerencia de la Universidad de Córdoba presentó al Comité de Empresa del PTGAS Laboral una propuesta de convocatoria de lista de llamamiento de técnico especialista para la Unidad Técnica, debido a la necesidad de personal del servicio.
Situación que ya se había puesto de manifiesto a lo largo de la negociación de la RPT en el año 2024, y principal motivo por el que en la misma se aumentaban considerablemente las plazas de este servicio.
De hecho, actualmente existen 12 plazas de técnico especialista aprobadas en distintas OEPs y pendientes de convocatoria:
• 5 plazas (OEP 2023) - deben convocarse antes de mayo de 2026.
• 3 plazas (OEP 2024)
• 4 plazas (OEP 2025)
Pero en lugar de ello, desde la Gerencia se propuso la creación de una nueva lista de llamamiento (la actual para este servicio es del año 2016).
Ante esta situación, desde CCOO se habló con los compañeros del servicio, quienes pusieron de manifiesto las necesidades y la situación de falta de personal en la que se encuentran. Siendo esto mismo ratificado por el propio director del servicio que lleva meses demandando que para una prestación correcta del servicio, hace falta personal.
De modo que en ese momento desde CCOO propusimos en el Comité de Empresa (en el mes de febrero) que la solución no era generar una lista de llamamiento de técnicos especialistas y seguir fomentando la temporalidad dentro de nuestra universidad, especialmente habiendo en aquel momento 8 plazas de empleo público aprobadas. Por lo que desde CCOO se proponía que la solución era convocar inmediatamente las plazas aprobadas y transitoriamente, hasta que este proceso finalizase, se contratase a alguien de la actual lista.
En este sentido, CCOO mantiene una posición coherente en todos sus planteamientos, analizando con rigor las propuestas de la institución y, por supuesto, escuchando siempre a las personas trabajadoras y a los servicios afectados. Solo así es posible valorar adecuadamente cada situación y formular propuestas responsables, con el único objetivo de defender los derechos laborales y hacer bien nuestra labor sindical.
Prueba de esta línea de trabajo y de esta coherencia, es que CCOO sólo ha apoyado en los últimos 5 años 5 listas de llamamiento y sólo en aquellos servicios donde no había ni ofertas de empleo públicas próximas a convocarse, ni bolsas de empleo en vigor; nunca hemos sido partícipes de crear puestos de trabajo temporales ni fomentar la contratación paralela especialmente en aquellos casos conocidos de creación de listas de llamamiento de grupos I y II a cuya aprobación la anterior mayoría del Comité de Empresa se plegaba incondicionalmente.
Finalmente, en el mes de junio, Gerencia se comprometió a disponer de la nueva lista de llamamiento antes de finalizar julio, junto con la propuesta de convocatoria de las plazas públicas. Esto ocurrió a pesar de no contar con la aprobación del Comité de Empresa, que por mayoría rechazó la medida al considerar que los plazos eran irreales, especialmente teniendo en cuenta la saturación actual del servicio de personal (con los únicos votos favorables en Comité de un sindicato afín a las listas).
Lamentablemente la realidad nos ha dado la razón y a día de hoy, ni siquiera se ha publicado la lista provisional de admitidos, por lo que de haberse negociado desde febrero la convocatoria pública de empleo de las plazas aprobadas (8) el proceso estaría mucho más adelantado y generando trabajo estable y no temporal. Alargando aún más en el tiempo esta necesidad de personal en UT, que además de dificultar la prestación de un servicio de calidad, genera una sobrecarga de trabajo en los compañeros del mencionado servicio.
Y por si no fuese suficiente, y de manera injustificada, aunque las plazas aprobadas son de técnico especialista y la propuesta enviada a este comité de empresa fue de técnico especialista, la persona contratada de la lista de llamamiento de 2016, donde no se especificaba categoría profesional alguna, ha sido contratada como técnico auxiliar. Aunque esta persona haya pasado una prueba y acreditado la certificación que se pide en la bolsa a la que nos referimos.
Volviendo a generarse desigualdades inexplicables en un servicio donde las pruebas realizadas en el proceso de selección ponen en tela de juicio si la categoría elegida para contratar a esta personal se adecua a las funciones que desde la Dirección del servicio se le exigen.
CCOO seguirá apostando firmemente por la estabilización del personal de la Universidad de Córdoba, sin plegarse a otras opciones que como han puesto de manifiesto la realidad, no benefician absolutamente a nadie, porque CCOO no vende humo, lucha por los derechos de las personas trabajadoras por igual, sin excepción ni distinción de servicio o categoría.